Nuevo curso

                                                                                 

Niños hoy ¿Serán hombres mañana? Alegría en sus rostros y gozo en sus corazones, porque aún no entienden de maldades ni el competir entre sí de la vida que les aguarda. Hoy para ellos empieza un nuevo curso regresan de unas vacaciones, los primeros días “hablarán de muchas cosas, recordarán, comentarán entre sí lo bien que lo han pasado”, será un ir y venir de recuerdos y sin darse cuenta van entrando en la preparación de un nuevo curso. Les enseñarán matemáticas, letras, ciencias, lengua y otras muchas más cosas. Para prepararlos como “hombres competitivos”, en la sociedad en la que se han de mover y saberse defender. ¿Pero les hablarán de Dios o de la caridad hacia los demás? ¿Les dirán que sean hombres humildes? Me temo que no. Dicen que no es sitio ni lugar para hablar de estas cosas. ¿Cuándo les será dada la palabra? Hoy es el tiempo de la siembra, para recoger mañana. Pero ahora serán preparados como hombres competitivos, no caritativos ni movidos por la fe. No entienden de humildad, o amor a Dios, ni asía los demás. Sólo por el dinero y el afán de triunfar aquí en la tierra. Por lo que cada vez cuenta menos los valoras humanos. Lo que más se valora de ellos es su rentabilidad, no su capacidad de amar, esto pasa a un segundo o tercer lugar. Ahora nos preocupa ejercitar la mente y cuidamos el cuerpo, le rendimos culto, sin pararnos a pensar por un momento que es obra de Dios, poco tiempo o ninguno, dedicamos a lo que es más importante que lo que habita en él, como es el Alma que será lo único que perdurará para siempre: El cuerpo se extingue y se corrompe, como todo lo que has conseguido aquí en la tierra. (Recuerda) que nada te puedes llevar contigo el último día por mucho que te hayas esforzado, marcharás ligero de equipaje, te has de presentar con las manos bacías. Lo único que vale es lo que perdura por siempre. 

J.G.M