domingo, 10 de enero de 2010

Soñar es vivir y vivir es soñar

Porqué sé que te quiero y no puedo estar lejos de ti.
Estas tan dentro de mí, que eres el aire que respiro.
Miro con tus ojos y hasta hablo con tu voz,
necesito estar cerca, muy cerca de ti.
Cuando me echo sobre tu piel, siento que formo parte de ti:
tengo deseos de abrazarte y tú me susurras al oído:
Hazlo, no tengas miedo, que no te importe el que dirán.
Echado sobre ti, siento en mi rostro esa suave brisa
que parece salir de lo más profundo de tus entrañas,
como un aliento suave oliendo a tomillo y jara
que hace estremecer todo mi cuerpo,
me embriaga y hasta me adormece.
Ya no te puedo olvidar.
Recuerdo aquellos años en que caminaba
por tus senderos, entre romerales solos tú y yo.
Te contaba todo lo que sentía y tú me escuchabas
bajo aquel silencio, cuando bajaba para bañarme en el río.
Nadie nos podía oír, hasta gritaba cuando te decía
¡Te quiero! ¡No me dejes! ¿qué haría yo?
Moriría. ¡No puedo estar lejos de ti!


(La vida es como un sueño, yo quiero soñar no me importa lo que digan. Tú sigue soñando, no quieras despertar)






J. G. M